jueves, 30 de noviembre de 2017

Ondas Gravitacionales: la nueva forma de “ver” el Cosmos.

Por Sinuhé A. Pérez Payán



En la segunda década del siglo pasado, Albert Einstein propuso la teoría de la Relatividad General, la cual vino a ser un parte aguas, junto con la Mecánica Cuántica, para la física y para nuestras vidas.

En esta teoría la gravedad surge como una manifestación de la curvatura del espacio-tiempo. Dicha curvatura es causada por la presencia de objetos masivos. Mientras mayor sea la concentración de masa, dentro de un determinado volumen, mayor será la curvatura del espacio-tiempo


Spacetime lattice analogy



A medida que un objeto masivo se mueve a través del espacio-tiempo, la curvatura cambia. En ciertas circunstancias, cuando objetos masivos se aceleran, se generan “ondulaciones” en la curvatura del espacio-tiempo, los cuales se propagan hacia afuera de la fuente a la velocidad de la luz. A estos fenómenos se le conoce como Ondas Gravitacionales.




Las Ondas Gravitacionales son una, de las muchas, predicciones la Relatividad General. En 2014 la colaboración LIGO (Laser Interferometry Gravitational-Wave Observatory) anunció la primera detección directa de este fenómeno, el cual lleva el nombre de GW150914.               

La Relatividad General es una teoría que es compatible con la teoría de la Relatividad Especial, la cual también fue introducida por Einstein alrededor de 1905. De esta última, surge probablemente una de las ecuaciones más famosas de la ciencia:  



Básicamente lo que esta ecuación nos dice es que la energía y la masa son cosas equivalentes. Por lo tanto, las Ondas Gravitacionales transportan energía en forma de radiación gravitacional. ¿Y cuál es alboroto con las Ondas Gravitacionales? Las observaciones astronómicas modernas se iniciaron con Galileo Galilei. De manera sistemática observó la radiación, luz visible, que emana de los cuerpos celestes. Sin embargo, sabemos que este tipo de radiación solo es una parte del espectro electromagnético. Con el desarrollo de la tecnología se han podido construir aparatos que pueden “ver” en el rango de las ondas de radio, con lo cual se descubrieron objetos astronómicos como los quasares y los pulsares. En la década de los años 90’s las observaciones astronómicas en el rango de las microondas nos han abierto las puertas para ver las huellas que dejó Big Bang. Entonces, contestando a la pregunta formulada anteriormente, el hecho de haber observado las Ondas Gravitacionales nos abre completamente una nueva forma de estudiar el Cosmos!

Las fuentes que pueden producir Ondas Gravitacionales son: sistema binario de estrellas en rotación, la explosión de una supernova, la formación o fusión de agujeros negros, del fondo cósmico de radiación, la rotación de una estrella de neutrones, y en general cualquier objeto masivo que se acelera. El poder detectar la radiación gravitatoria proveniente de las diferentes fuentes mencionadas anteriormente, abre una ventana para explorar todos estos fenómenos astronómicos.

Debido a que la fuerza gravitacional es la más débil de las fuerzas fundamentales en la naturaleza, hace que la detección de Ondas Gravitacionales sean muy difícil, pero al mismo tiempo es lo que las hace tan interesantes. Una vez producidas muy poca de su radiación se absorbe, esto nos permitiría poder “ver” de cerca el horizonte de un agujero negro, o poder vislumbrar momentos tempranos del universo.

A la fecha se han registrado 7 eventos de Ondas Gravitacionales. La primera detección, GW150914, fue debida a la fusión de dos agujeros negros de 29 y 36 masas solares, dando como resultado un agujero negros de 62 masas solares y las 3 masas solares restantes fueron emitidas en forma de Ondas Gravitacionales;  este evento ocurrió a 1.3 billones de  años luz.

El pasado mes de octubre la Real Academia de las Ciencias de Suecia otorgó el premio Nobel de Física a Rainer Weiss, Barry C. Barish y Kip S. Thorne, “por sus contribuciones decisivas al detector LIGO y la observación de ondas gravitacionales”.

Se espera que con este descubrimiento empiece una nueva revolución en la física. El tiempo nos dirá si hay más cosas “escondidas” en el Cosmos.

Para más información:

1)      http://www.ligo.org/

2)      James Hartle, Gravity: an introduction to Einstein’s General Relativity, Addison-Wesley, 2003.

No hay comentarios.:

Publicar un comentario